domingo, 5 de noviembre de 2006

DIARIOS


No suelo pasear, lo reconozco. Entre semana sueño con perderme por un camino rural, rodeada de silencio y de esa sensación de no hay prisas con olor a café y sábanas calientes. Pero cuando llega el momento, el cansancio mental se transforma en losa que me aplasta las ganas. Luego, la rutina comienza de nuevo y me arrepiento. Así que hoy, tirando más de voluntad que de ánimo, cogí la bicicleta y salí de mí casa, dirección a ninguna parte.
No recuerdo cuanto rodé, supongo que poco, el frío y la falta de costumbre entumecieron pronto mis piernas. Salí del camino y subí por una loma. Allí me encontré con una mujer bien extraña. En realidad cuanto me rodeaba lo era. Una casa de muros de piedra y tejado de paja, con un establo de madera adosado y una cerca para las gallinas. Un mastín viejo me miró desde la entrada, pero las gallinas parecían interesarle más que yo.
La mujer vestía unas ropas curiosas, casi medievales diría. Llevaba una especie de cofia con orejeras que le daba cierta similitud con sus ovejas, una falda larga y andrajosa, y un chal de punto lleno de agujeros y remiendos. Estaba tendiendo en una cuerda sujeta por dos estacas.
-Esta tarde lloverá- Me dijo mirando al cielo de reojo- Pero con un poco de suerte se me secarán las hojas.
Entonces me fijé. No era ropa lo que tendía, sino páginas escritas en una especie de tejido semejante al papiro. Debí poner cara de no entender nada porque la mujer me preguntó- ¿Qué pasa, nunca has lavado un libro?
-No, la verdad- le contesté- ¿para qué lo haces?
-Pues para limpiar lo que está sucio- me respondió como si fuera lo más obvio del mundo- Ya soy vieja. Demasiado vieja.-Miró sus manos nervudas llenas de manchas café con leche
-Ayer leí mis diarios y vi partes de mi vida más negras que el hollín. No he sido una santa ¿sabes? Pero la vida es dura y a veces hay que hacer cosas para defenderse-Me miró desafiante.
-Yo rompí los míos- contesté. No sabía porqué aquella mujer me contaba todo aquello ni qué esperaba que le dijera.
-¿Tan sucia ha sido tu vida?- me preguntó.
-No, no-respondí.- Empecé a escribirlos porque siempre tuve miedo a olvidar quien era, a perderme en el tiempo. Pero al leerlos supe que ya no necesitaba guardarme por escrito, que yo no era unas frases escritas que pudiera borrar o extraviar. Me di cuenta de que yo era mucho más que mi historia. Mi vida era lo que yo decidiera en cada momento. De alguna manera me había llegado a encontrar. Así que los rompí.
La mujer miró las hojas mojadas estrujando con resignación una de ellas.
-Tal vez tengas razón, niña. Somos lo que somos en cada momento.



P.D.Es cierto, hace unos meses rompí mis diarios. Hacía años que no escribía,pero seguía conservándolos. Sentí que ya no me hacían falta. No se explicarlo. No fue un renegar de mi historia, sino todo lo contrario. Mi memoria forma parte de mi y soy su resultado, pero es el presente lo que vivo y el futuro lo que sueño.
Feliz comienzo de semana.

Rescatado de mi blog en ya.com

1 comentarios:

Anónimo me dijo:

Dime:
parece q el destino ha querido q lea este post justo hoy, cuando parece q lo necesito más q nunca. Creo q es hora de quemar mis diarios y pensar más en hoy... besos
natalia (cenicienta) Viernes, 12 Enero 2007 00:07 (Correo) (Web)

Dime:
realmente he quedado sin palabras despues de ver su space, realmente me he deleiatado con cada palabra y cada verso me ha maravillado, la feleicito pues escribe usted muy bello
Ana María Táutiva Martes, 28 Noviembre 2006 00:30 (Correo)

Dime:
Qué bonito. Es como soltar lastre para seguir elevándote. Besos de colores
Sweetmayoo Martes, 14 Noviembre 2006 21:26 (Web)

Dime:
¡Ahí me has dao!
MU ARAE Jueves, 9 Noviembre 2006 19:30 (Web)

Dime:
http://blogs.ya.com/lacanalla2/200611.htm#110


Creo que te puede gustar.
Kaizen Jueves, 9 Noviembre 2006 12:26

Dime:
Hace unos meses que tengo la misma sensación que tu.
Al releer mi diario virtual, no es que no me reconozca, es que necesito dejarlo atrás para poder mirar hacia adelante.
Es curioso como cambia la perspectiva de las cosas.
Tu vivencia reflejada en el relato es bella, muy bella.
Saludos
MDM Miércoles, 8 Noviembre 2006 20:42 (Web)

Dime:
yo mis diarios los tiré por causas ajenas a mí... y ahora me arrepiento tanto de haberlo hecho...
besos!
marta morena Miércoles, 8 Noviembre 2006 15:58 (Web)

Dime:
Caramba, Andy, qué maravilla de relato, de verdad, me ha parecido fantástico. Y esa imagen de páginas tendidas al sol... fabulosa.
Yo nunca he escrito un diario. Lo intenté en un par de ocasiones, pero la vez que más perseveré creo que debió ser un par de entradas.
De todas formas, creo que los diarios adquieren valor con el tiempo y que, aunque nos disgusten, son testimonio de un tiempo. Yo no sería partidario de lavarlos, claro, pero tampoco de romperlos. Sobre todo los tuyos, que debían ser una maravilla.

Me encanta leerte, Andy.
wolffo Miércoles, 8 Noviembre 2006 10:41 (Web)

Dime:
Ya, sino digo que no, pero a veces haces como una crítica o mejor dicho, comentas sobre lo que has escrito pero no dices nada de ti. A eso me refería, pero si te gustó el comentario, mejor que mejor!!

Bona nit
Sefarad Martes, 7 Noviembre 2006 22:53 (Web)

Dime:
un relato genial, me alegra haber cogido la bicicleta y que me haya llevado a tu puerta.

un saludo
nyc Martes, 7 Noviembre 2006 17:44 (Web)

Dime:
Yo regalé uno de ellos, no tenía mucho tiempo y no quería volver a leerlo... era más fácil olvidarse... El resto los conservo... supongo que para no olvidarme... Un saludo.
Ume Martes, 7 Noviembre 2006 12:16 (Web)

Dime:
Tus historias siempre me hacen volar... Muy pocos lo consiguen porque son de esas que cuentan a los niños antes de irse a la cama... generan sueños mágicos...

Un beso.
Abril Lunes, 6 Noviembre 2006 20:05 (Web)

Dime:
No soy dada a escribir diarios y hace mucho que no escribo en un diario. Me parece más divertido dejar los retazos de mi vida o de mi misma en mis escritos, dejando que se puedan leer aspectos entre líneas... pero sin que el que lo lee llegue a saberlo.
Aun asi durante un tiempo en el que estuve mal escribí lo que más me dolía en algo que sí que podría llamarse diario.
Es curioso.... Todos los años quiero quemarlo (a nadie le gusta recordar lo que le duele aunque generalmente es lo que más le hace ser quien es) y todos los años se me pasa... Hasta que vuelvo a recordar que sigue guardado donde siempre.
Quien sabe... quizá este año lo queme por fin.... o quizá se me vuelva a olvidar
Saludines
Rosa Roja Lunes, 6 Noviembre 2006 18:46 (Web)

Dime:
Yo he perdido mis diarios varias veces por azares de la vida.
Después, he preferido pensar que nadie los leyó... sin embargo hay veces que me topo con personas que parecen adivinar de mi, lo inconfesable...

Un beso.
Susy Lunes, 6 Noviembre 2006 15:17 (Correo) (Web)

Dime:
he pensado mil veces en tirar mis diarios, mas que nada pq no quiero que nadie los lea, de verdad, no lo soportaría. Me encanta saber que algunos de mis pensamientos solo los comparto conmigo misma.Pero al final siempre los conservo, no me fío de mi memoria para recordar algunas cosas que no quiero olvidar...

un beso
hanika Lunes, 6 Noviembre 2006 10:58 (Web)

Dime:
jajaj Sefa, a ti la olla, a mi la pinza. Vaya par. Me gustó el comentario, los prefiero personales. Creo que de eso se trata ¿no?, sino escribiríamos un blog técnico.
Bona nit.
Andaya Domingo, 5 Noviembre 2006 23:59 (Correo) (Web)

Dime:
En mi caso los sigo conservando pero hace mucho tiempo que no escribo en ninguno de ellos, hace un tiempo releí algunas páginas de cuando tenía 16 años y sonreía, la verdad es que no he cambiado mucho. Incluso me reconocí de nuevo engañándome a mi mismo para no creerme algunas cosas que no me gustaban y me pasaban, para dulcificar incluso ese diario. Pero ese autoengaño era mi defensa, por eso sonrío al releerlo, porque no conseguí engañarme, yo mismo sabía la verdad.

Bueno, perdón, se me fue la olla ahora a mi, personalicé el escrito.

Mañana lo redirecciono desde la página.

Gracias por inspirar.
Sefarad Domingo, 5 Noviembre 2006 23:55